¡Hola! Soy Miriam, aunque con confianza me puedes llamar Mimi. Soy venezolana y llevo 8 años viviendo en Madrid. Mi historia es un camino de retos, caídas y grandes aprendizajes que hoy quiero compartir contigo.

Cuando llegué a España, abrí mi primer negocio: un restaurante de comida venezolana. Tras tres años de esfuerzo, diferencias con mis socios nos llevaron a cerrar, lo que fue un golpe difícil. Asumí una deuda de 50 mil euros que tuve que enfrentar sola, pero no me rendí. Con ayuda legal y la Ley de Segunda Oportunidad, logré superar esa carga y seguir adelante. Ese episodio me enseñó que, aunque la vida nos ponga pruebas, siempre hay salidas.

En 2021, la vida me dio una nueva razón para soñar: me enteré de que estaba embarazada. Mi enfoque cambió completamente, y aunque quería regresar al mundo del emprendimiento, decidí disfrutar plenamente de esta etapa. Pero los retos no habían terminado.

En enero de 2023, cuando mi hija tenía solo seis meses, recibimos la noticia de que padecía una cardiopatía y necesitaba una operación a corazón abierto. Comenzó una cuarentena estricta que mi esposo y yo enfrentamos solos, sin ayuda cercana. Fue un periodo difícil, pero también el catalizador para redescubrirme. Recordé mis estudios en comunicación audiovisual, diseño y marketing, así como mi amor por aprender de manera autodidacta.

Decidí emprender nuevamente desde casa, convirtiendo una habitación en mi taller. Compré mi primer plotter, una plancha de estampados y un ordenador. Así nació mi negocio, donde poco a poco aprendí a manejar las máquinas, crear estrategias de marca y usar las redes sociales para conectar con clientes. Inspiré a otras mamás a entrar al mundo crafter y demostrar que el amor de una madre puede mover montañas.

En solo tres meses, renuncié a mi empleo y me dediqué al 100% a mi emprendimiento. Para noviembre de 2023, logré vender 1,500 bambalinas navideñas, lo que me dio un respiro económico justo antes de la operación de mi hija en diciembre. Fue el momento más aterrador de mi vida, pero también me enseñó que la resiliencia y el amor pueden superar cualquier obstáculo.

Hoy, mi negocio ha crecido y mi taller ocupa el cuarto más grande de nuestra casa. He formado una comunidad llamada "Soy Mimi Crafter", donde ayudo a mujeres, especialmente mamás, a empoderarse y desarrollar habilidades que les permitan generar ingresos desde casa.

Mi misión es inspirarlas a superar el miedo y la vergüenza, porque esas emociones no pagan las facturas. Quiero que descubran su potencial y logren estar donde realmente quieren estar.

Gracias por leer mi historia. Esto es solo el comienzo, y estoy emocionada por todo lo que viene.